|
El asna que habló |
y otras historias de animales en la Biblia |
Por PARK, S. Stuart |
|
La Biblia contiene muchas historias en las que el mundo animal desempeña un papel significativo, como el asna de Balaam, dotada de mayor discernimiento espiritual que su amo; las vacas de Bet-semes que separadas de sus crías cumplieron fielmente con su destino: las dos osas enfurecidas que salieron del bosque para defender al profeta Eliseo; el gran pez que tragó al profeta Jonás; la zorra y la gallina que evocó Jesús al conocer la intención asesina de Herodes y el humilde pollino en el que Jesús entró en aquella ciudad, son solo algunos de los animales que protagonizaron historias sorprendentes de la Biblia. A ellos dedico estas páginas con gratitud.
|
|
ISBN: 978-84-09-1226-5 |
Publicado: Mayo de 2019 121 pgs. | 12.00 € (IVA
Incluido) |
Existencias: Sí |
Leer un fragmento |
Comprar este libro |
Valoración: |
|
5 COMENTARIOS: | 21/08/2020 |
| `El asna que habló´ ya es uno de los mejores libros que he leído en mi vida. Pasajes sobre los que habia predicado en varias ocasiones cobran ahora nuevo significado, con nuevas reflexiones que dan más gloria al Autor de la Biblia por su cuidado y cariño... también hacia los animales.
¡¡Gracias por escribirlo!! |
Benjamín GÁLVEZ ARQUEROS Comunicador y autor | 18/06/2019 |
| Has escrito otro hermoso libro, un libro sobre la ternura y la dulzura de Dios, el Creador y el Redentor. Es un libro que se lee con la sonrisa en la boca, como si estuviéramos contemplando una pajarita alimentando a sus polluelos en el nido. Pero sería un error ver el texto como algo simplemente hecho para derretirnos. Como siempre, estás comprometido al escribir con el inmenso drama de nuestra salvación.
Creo que hay un doble valor en tu meditación. Por un lado, el comentario de cada pasaje apunta a su valor hermenéutico (quizás debiera decir exegético). Además para esta lectora tu libro subraya la compenetración de la creación con la persona de Jesús. Como dice Juan, por él fueron hechas todas las cosas. El polvo de que hemos sido hechos según el Génesis pasa a través del reino vegetal y animal. Compartimos material genético con todo lo que está vivo y material molecular con todo lo mineral del universo. Eso no es poca cosa. |
Aurora CAMACHO DE SCHMIDT Profesora emérita en el Swarthmore College de Pennsylvania, EE.UU., y poeta. | 13/06/2019 |
| El asna que habló es muy original, y para los que somos amantes de la naturaleza, un deleite. Creo que eres la primera persona que escribe sobre este tema, por lo menos yo no conozco ningún otro libro parecido.
¡Enhorabuena! |
Pablo MARTÍNEZ VILA Médico-psiquiatra, escritor y figura prominente del protestantismo en España. | 12/06/2019 |
| Los libros de Stuart son ágiles, aunque profundos; ligeros, a pesar de un lenguaje tremendamente cuidado, pulido y exquisito. El lenguaje de este libro es tan sumamente cuidado y delicioso, que envuelve como en una nube a quien está leyendo; y ¡Por supuesto! Pasando por diferentes vías, nos lleva a lo más sublime, al Creador, y al mismísimo cielo. Podría estar horas escribiendo todas las bellezas de este encanto de libro, pero quiero dejar que las descubráis por vosotros mismos. |
Beatriz GARRIDO SACO Poeta y Comunicadora | 03/06/2019 |
| En su vigesimoprimer libro el autor nos introduce en el interés y cuidado de Dios por toda la creación, y en particular en lo que ahora nos concierne, el cuidado de todas las especies (Génesis 1:20-25). El libro contiene bellas ilustraciones, obra de Anna Kús.
El título es muy atractivo: El asna que habló. Se refiere a un episodio que le sucedió al falso profeta Balaam en el libro de Números. En su relato se acompaña de otros animales en la Biblia que nos invitan a ver la figura de Cristo como Señor de todo lo creado. Por ello, en palabras de S. Pablo, «toda la creación gime a una» en la esperanza de que un día le veremos cara a cara ante el trono de la gracia.
Los animales cuyas historias se relatan son del género femenino: el asna de Balaam, las vacas de Bet-semes, las osas que salieron del monte, el pez (femenino) que tragó a Jonás, la zorra y las gallinas, y por último el pollino hijo de asna. La tarea encomendada a cada uno de estos animales pone de relieve su entrega humilde y generosa, así como su capacidad de sufrimiento. El asna de Balaam salvó a su dueño de la muerte; las vacas de Bet-semes fueron apartadas de sus crías, y como dice el autor: «se encaminaron bramando y andando sin separarse ni a derecha ni a izquierda». ¿Qué les movió a dejar atrás a sus crías y encaminar en contra de todos sus instintos?
El autor denuncia el maltrato animal al que Balaam sometió a su asna, y recuerda, de paso, el más grave estigma de nuestra sociedad: la violencia hacia la mujer. Dios dio leyes a los hombres para el cuidado de toda su creación, pero el hombre se apartó de Dios y alteró el cuidado de la misma y, así las consecuencias se hacen evidentes en el medio ambiente y en la sociedad que nos ha tocado vivir.
Este libro nos confronta y apela hacia nuestro saber ser y estar ante la obra del Creador y el ejemplo de Cristo. Su lectura me ha reconfortado.
No puedo por menos que recordar la situación de nuestra legislación en el tema de maltrato animal. En la actualidad existe en tramitación parlamentaria (paralizada a causa de las elecciones) una modificación del Código Civil español y de la Ley Hipotecaria sobre el régimen jurídico de los animales, que siguiendo a la legislación comunitaria considere a los animales de compañía como «seres sensibles», debido a que hasta ahora nuestro régimen jurídico de los animales establece que son meras «cosas», un bien mueble.
Por otro lado, viene a mi mente la gran obra de arte de Diego de Velázquez ‘Las meninas’ que integra dentro de su lienzo a un animal en primer plano, un perro; su ubicación en torno a la familia denota que es un animal de compañía, y pone de manifiesto que la sensibilidad hacía los animales viene de lejos. |
Charo PABLOS BARRADO Letrada. Valladolid.
| |
|
|